Hoy os han llegado los boletines de
notas.
Y habrá de todo, como en botica.
He echado la vista atrás, muy atrás,
cuando en casa de mis padres también llegaba mi boletín de notas.
Y aunque no hubiera suspensos siempre
traían la misma cantinela:
“Puede hacer más”, “tiene
capacidad para sacar mejores notas”...
Imagino que esa canción seguirá
sonando, ¿verdad?
Bien, la segunda evaluación ya ha
pasado y (como “buenos” futbolistas y entrenadores) ahora es
cuestión de centrarse en la próxima.
Entra dentro de lo normal y deseable
que queramos lo mejor para nuestros hijos.
Pero hemos de tener en cuenta que cada
uno tiene su ritmo de evolución, trabajo y crecimiento. Y lo
importante es seguir estando AHÍ con ellos.
Yo estoy satisfecho de los resultados y
quiero que los mejoren.
Vamos a poner empeño en seguir
marcando el ritmo de trabajo, con buena letra y mejor comprensión,
más dedicación con lo que tienen que aprender y con el estudio.
Seguiremos animándoles para que
sientan que confiamos en ellos , que nos vean delante desbrozando el
camino, y, que con el “botiquín” pondremos remedio a sus rasguños.